Vivimos en un mundo cambiante donde no hay sector que no haya sido en mayor o menor escala afectado por los cambios que se producen en nuesta sociedad.
Aun la iglesia, una de las entidades más apegada a sus convicciones, se ha visto afectada por los cambios que se han convertido en una demanda en el mundo de hoy.
Es muy común que las iglesias en su afán por tener un crecimiento en su membresía lleguen hasta el sacrificio de lo que son los principios de la sana doctrina de la palabra de Dios.
Craso error, ya que la biblia establece con claridad meridiana que "Sin santidad nadie verá al Señor" Heb. 12:14 y 1ra de Pedro 1:16. Y si la meta final es ir al cielo y conducir a otros entonces suena contaproducente sacrificar la santidad por llenar un templo.
Y no estamos hablando de una santidad perceptiva, la que en un afan por justificar su ausencia se analiza desde el punto de vista humano y se acomoda el término. La santidad está claramente establecida en la palabra de Dios y no es asunto de interpretación ni percepción.
De nada le vale a un ministro vivir en santidad, predicar la santidad y no establecer la santidad como requisito principal para formar parte del liderazgo de su congregación.
La biblia establece que "El trigo y la zizaña crecen juntos" y no toca a los siervos de Dios separar la una de la otra, de manera que la iglesia está abierta a todo el que quiera congregarse, sin embargo el que desea ministrar en la casa de Dios tiene la obligación de buscar la santidad segun Hebreos 12:14.
Para aquellos que no se han conformado a este siglo, que no se adaptan a los cambios que han penetrado hasta el altar, que no tienen ningun tipo de intención de renunciar a sus principios morales y espirituales, es bueno saber que podemos contar con iglesias que en término figurativo "No han doblado sus rodillas a Baal". No se han arrodillado ante la imperante necesidad de hacer cambios los cuales afectan el buen funcionamiento de una iglesia santa, sin manchas ni arruga, como es la iglesia de Cristo.
Agradezco a Dios por haberme permitido militar en una iglesia donde no sólo se predica, sinó que se practica la sana doctrina de la palabra de Dios.
La doctrina que enseña que hay un solo Dios verdadero, que nadie llega al Padre si no es através de su hijo Jesús, que cree en el bautismo en las aguas para arrepentimiento y en el Espiritu Santo para purificación.
Una iglesia que cree que Cristo viene pronto a buscar un pueblo santo, lavado con su sangre y una iglesia que cree en la sanidad divina. No hay una sola de estas creencias que no esté contenida en las sagradas escrituras.
Oramos a Dios para que Oasis de Amor siga hacia adelante hasta que el Señor venga.
1 comment:
Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, 2 que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina. 3 Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, 4 y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas.
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